Educando a Chipo. Persecución y llamada.

En esta sección utilizaré unas veces a Chipo y otras a Pana, 2 perros imaginarios que podrían ser cualquiera de los nuestros, con los que ilustraré mediante ejemplos prácticos algunos comportamientos comunes por parte de perros y como se debería actuar.

Chipo en persecución

Chipo persigue a un gato por la calle y tú estas gritando su nombre como un poseso y ni puñetero caso. Cuando vuelve, estás enfadadísimo/a y le regañas por haber perseguido el gato, por no haberte escuchado y por asustarte de ese modo.

Cómo percibe Chipo la situación?

-El piensa, que persiguió al gato, su adrenalina y el instinto depredador hicieron que se lo pasara en grande.

-Después volvió a tu lado y le regañaste, lo cual no fue nada divertido.

Moraleja: lo que le querías enseñar es que no debe perseguir a los gatos, pero....... lo que realmente le enseñaste fue que venir a donde estás puede ser desagradable.

No importa lo que haya hecho (si no lo pillas en el momento no sirve de nada), sé amable con él y salúdalo con una palabra cariñosa, una caricia en la cabeza o una sonrisa. Enséñale a confiar en ti. Porque si lo llamas y después lo castigas, bajará su nivel de confianza en ti.
Si Chipo te busca y lo castigas el piensa que es por venir hacia ti. Sólo entiende tu rabia, no las razones que hay detrás.

Si quieres conseguir que Chipo aprenda a venir hacia ti cuando lo llames, recuerda ésto: cuando llegue adonde estás, sé amable con él. No hagas nada que pueda percibir como molesto o desagradable. Por ejemplo si quieres darle una pastilla o un baño, u otra cosa que no le guste, no le llames. Ve tú a buscarle y antes y después de bañarlo o darle la pastilla dale una golosina, juega con él y su juguete preferido, es decir algo que le guste mucho.